Para los amantes del vino, disfrutar de una copa puede ser un placer exquisito. Sin embargo, es habitual que no acabemos la botella que abrimos para brindar con alguien o, sencillamente, para disfrutarla. Por eso desde Pilares de Belesar, tu bodega en la Ribeira Sacra a orillas del río Miño, queremos que conozcas muy bien los consejos con los que puedes conservar un vino cuando ya está abierto ¡Toma buena nota!
Volver a cerrar la botella correctamente
El primer paso para conservar el vino es asegurarse de volver a cerrar la botella adecuadamente. Si tienes el corcho original, es ideal reutilizarlo. Solo hay que introducirlo del lado limpio que estuvo en contacto con el exterior del vino. Desde nuestra bodega Pilares de Belesar en la Ribeira Sacra, te recomendamos que si el corcho ya no está disponible o se ha roto en la apertura, una buena alternativa sería usar un tapón de vino reutilizable, que puedes encontrar en tiendas especializadas. Estos tapones, de hecho, crean un sellado más hermético que el corcho.
Utiliza una bomba de vacío
Una bomba de vacío es una herramienta bastante útil para eliminar el aire de la botella, lo que ralentiza el proceso de oxidación del vino. Al extraer el aire, creas un ambiente más favorable para su conservación, manteniendo su sabor y aroma por más tiempo. Este dispositivo es fácil de usar y es una inversión que merece la pena si consumes vino habitualmente, pero no terminas con las botellas una vez abiertas.
Mantén la botella en posición vertical
Guardar la botella en posición vertical minimiza la superficie del vino en contacto con el aire. Esto reduce la oxidación y ayuda a conservar los sabores del vino. En Pilares de Belesar te aconsejamos almacenar la botella en posición horizontal una vez abierta, ya que incrementa la exposición al oxígeno.
Guarda el vino en un lugar fresco y oscuro
La temperatura es un factor crucial para la conservación del vino. Una vez abierta la botella, guárdala en un lugar fresco sin luz directa del sol y donde no haya cambios bruscos de temperatura, ya que pueden alterar las propiedades del vino. Una vinoteca es lo mejor, pero si no la tienes, el frigorífico de la cocina te ayudará igualmente.
Consumo dentro de los plazos recomendados
El tipo de vino influye en el tiempo que puedes conservarlo una vez abierto. Los vinos tintos suelen durar entre 3 y 5 días en buenas condiciones, mientras que los blancos y rosados pueden mantenerse frescos hasta una semana. Los vinos espumosos, por su naturaleza, pierden su efervescencia más rápidamente, así que recomendamos consumirlos en un máximo de 1 a 3 días.
Te ayudamos a disfrutar y conservar los mejores vinos de la Ribeira Sacra
Con todos estos consejos, desde nuestra bodega en O Saviñao en la Ribeira Sacra, pensamos que ya tienes las claves principales para conservar cualquiera de nuestros vinos una vez que ya los hayas abierto. Pero, si todavía tienes dudas, contacta con nosotros y te las resolveremos.